El camino equivocado (17/01/13)

Toda nuestra vida es como un recorrido en el que te dan varias opciones y tú tienes que decidir cuál es el camino correcto.

Pensé que había tomado la decisión correcta, que todo estaría bien, pero otra vez me equivoqué. Pensar que esa persona estuvo llenando tu vida de ilusiones para que luego, sin pasar nada, acabe en pedazos rotos que se dispersan dentro de ti. La peor parte fue que después decidí tomar un camino nuevo, concretamente un tercer camino. Al principio, todo era como un sueño perfecto, no había nada que me descontentara. Pero, cuando pasa un tiempo, vas viendo cómo es realmente y te das cuenta de que eso no era lo que querías. Tú querías seguridad, confianza, amor, cariño, libertad.. Y al final te encuentras con una libertad, que lo único que consigue es atraparte, una confianza que a la mínima eres capaz de perder y una seguridad que directamente ni existe, porque piensas en el futuro y te quedas en blanco, ya que por mucho que quieras cambiar tu pensamiento y creer en algo positivo, acaba convirtiéndose en una realidad que duele.

El segundo camino acabó por desaparecer, pero el primero todavía seguía allí. Son tantos los recuerdos que guardo de él, además de sentimientos que jamás habría llegado a creer que existieran, y sueños que en un futuro serían una realidad. Y por mucho que haya soportado o sufrido, todavía puedo notar esa pizca de cariño que a veces llega a ser muy intensa.